Yace en el corazón de los valientes
aquella llama ardiente
que los mantiene vivos y con cierto sentido,
ante la inexplicable presencia
en este mundo perdido.
Van caminando por los senderos;
algunos con rumbo fijo
otros con afán de fanatismo
y por ultimo están aquellos
que perdiéndose en varios caminos
se encuentran con el famoso destino.
Y esos valientes,
aquellos que no dejan que su inocencia muera,
aquellos que andan aunque llueva,
esos que van construyendo utopías,
esos que van construyen un pedazo de cielo,
esos que van soñando y haciendo,
esos valientes que aun chimuelos van sonriendo.
Esos que en el amor a sus sueños,
a la voluntad de sus medios
y al coraje de sus deseos
van y no desisten,
vuelan,
vuelan entre sus miedos.
Para GVR
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