El coraje a guardarme tu amor, Las agallas que tengo de soportarte, De fingir que no quiero tus besos, De simular que tu mirada me pone de los nervios De tener que correrte en mis noches, Donde por contemplarte no descanso ¡ni madres! Mi felicidad se basa en la mueca de tus labios Y el brillo de tus ojos. Cuando tus labios se curvan arriba y tus ojos se jactan de la vida, Soy y comparto tu alegría, Aunque no afecte ningún sistema nervioso Que mande señales para ser motivo yo de esa sonrisa.