Cuando yo tenía 9-10 años, mi abuelo materno fue diagnosticado con cáncer y mi padre fue despedido de su trabajo. Entonces, en mi casa todo era un poco extraño. Mamá se levantaba demasiado temprano para ir a las quimioterapias de mi abuelo a Obregon,Sonora. Papá también se levantaba muy temprano para dejarnos a mi hermano y a mi a la escuela y él buscar trabajo. Todo era para mi muy extraño. Pero, lo que quiero referirme principalmente es que en todo ese "caos" había momentos donde miraba a los demás e imaginaba su sentir.
Cuando la situación económica se puso un poco ruda en mi casa y mis padres se miraban preocupados, yo empecé a escribir historias. A $2 pesos las historietas de super fafa y a $10 pesos los cuentos. Cómo estudiaba con mucho esfuerzo y apoyo en un colegio,lograba venderlos a mis compañeros. No obstante, una vez me cacharon en la escuela y me tuvieron que llevar a la dirección. Cuando mis maestras me preguntaron porque hacia eso, yo les dije que era para ayudar a tener comida para mi papá y mi mamá. Entonces, recuerdo que me dejaron seguir haciéndolo,con su respectiva "llamada de atención".
Empecé a ponerle más atención a la ortografía y a los cuentos.Diría que a la caligrafía,aunque honestamente tuve y sigo teniendo una letra fea pero legible. Entonces, escribir en un diario,leer cuentos y a veces el diccionario(por culpa del abuelo) me mantenía entretenida en mejorar lo que quería transmitir. A veces escribía historias cortas con relación a los sentimientos que miraba que sentían las demás personas a mi alrededor. Mis abuelos,mis padres, mi hermano,mis compañeros,etc.
Un día se abrió un concurso donde tenías que escribir un cuento de temática libre. Por lo cual, en ese momento yo entré con el cuento "La Sagrada Familia" donde describía con detalle el entorno en donde yo me encontraba, con la única variante de que en el final de la historia mi abuelo se curaba del cáncer y mi papá conseguía un trabajo y todos "eramos felices". Recuerdo que me tocó leer enfrente de todos mis compañeros de salón el cuento. Y yo en esa época tartamudeaba mucho,además de que era muy nerviosa.Al final,mi cuento fue elegido para concursar en representación de mi salón.
Y gané.Mi cuento ganó a nivel regional y a nivel estatal.Fue publicado en alguna parte que no recuerdo. El día que me enteré, fue el día más feliz de mi vida. Mis padres ese día fueron a la escuela de sorpresa, y yo extrañada les pregunté que hacían ahí. No dijeron nada y solo me abrazaron con una sonrisa de oreja a oreja. Me reconocieron,me dieron un diploma y tuve mi primera publicación en algún libro de la SEPyc.
A las semanas o meses, mi abuelo falleció. Es curioso,porque cuando pasan esos sucesos, el tiempo parece una gota de un fregadero mal cerrado.Cae lento y de poco a poco se desborda violentamente. Así fue el día que me enteré de la muerte de mi abuelo. No me dejaron ir a verlo, temieron que fuera algo demasiado fuerte para mi de vivir. Por lo tanto,me quedé en casa de mis otros abuelos,donde me llevé una mi caja de historietas de Tom y Jerry, Archie,Memín Penguín y otros tipos. Recuerdo que lloré mucho y a su vez leer historietas me ayudó a sobrellevar ese episodio en mi vida.
Pese a ello, yo a partir de eso, comencé a escribir sobre todo. Hasta de lo más insignificante yo sacaba una historia de ello. Mi padre después consiguió un trabajo. Yo fuí más aplicada con todo aquello que tratara de escribir. Porque para mi escribir era tener un poder de viajar en el tiempo, de sobrepasar los límites de los sentimientos, de poner bajo lupa cosas y situaciones.
Para mi escribir era abrir camino a una oportunidad. Para mi escribir es medio de plasmar historias, sentimientos, noticias. Para mi escribir es conectarme con el abuelo. Es volver a ser una niña con la cabeza volando por los cielos.
Hoy en México es el día del padre y el día que me quiero despedir de este diario que me ha dado muchas alegrías,me permitió conocer mucha gente, desarrollar mejor(o peor) mi escritura y conocerme a mi en otros tiempos. Hoy en el día del padre, y después de contar esta historia personal, quiero agradecer a mi padre y a mi abuelo que también fue como un papá. Porque gracias a ellos yo descubrí la escritura. Gracias a ellos, yo descubrí y desarrollé más la empatía. Gracias a mi abuelo y a mi padre, yo pude brindar un poco de distracción a la situación. Gracias a ellos, me dieron el poder de elegir plasmar mis ideas, mi relato,mi vida en hoja,en tinta,en palabras aquello que yace dentro de mí.
Y si bien,mamá es la culpable de que yo haya seguido leyendo y desarrollando la escritura. Tuve una red de apoyo monumental que me dieron el espacio y el respeto de escribir lo que yo quisiera,aunque muchas veces no se entendiera.
Feliz día del padre.
Feliz día,Papá.
Feliz día,abuelo.
Feliz día a todos los futuros padres, que ojalá le regalen a sus hijos lo que mi familia me regalo:
Una Sagrada Familia.
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